Proceso de repintado en auto híbrido y eléctrico, ¿es lo mismo que uno de combustión?

En términos generales, el proceso para reparar la superficie o aplicar pintura automotriz en un auto híbrido o eléctrico es muy similar a uno de combustión.

Sin embargo, hay algunas diferencias notables, sobre todo en aspectos de seguridad y al cuidar algunos detalles al manejar pinturas de fondo y acabado, así como en el proceso de secado.

¿Por qué se debe tener cuidado al repintar un auto híbrido?

En primer lugar, porque en este tipo de carrocería se trabajará de la mano con sistemas de alto voltaje o electrónicos de asistencia a la conducción (ADAS) u otras mejoras tecnológicas que presentan estos autos.

Es verdad que los fabricantes de coches eléctricos ofrecen una serie de medidas que blindan a los operadores (e incluso maestros pintores) ante peligros potenciales que esos elementos tecnológicos pueden provocar, pero un taller de repintado automotriz siempre debe prevenirse: crear sus manuales, protocolos de seguridad y prevenir cualquier escenario.

¿Qué medidas debe tener presente un taller al repintar autos híbridos/eléctricos?

Lo primero que se debe tomar en cuenta es la seguridad del operador, es decir, quen va a pintar el auto. Éste debe contar con máscara, guantes, y gafas protectoras.

Después, el operador debe aterrizar todas las cargas estáticas de las piezas que vaya a reparar, así que es esencial que desconecte la corriente y se asegure de que no haya voltaje ni que éste se conecte durante el proceso de repintado.

Para disminuir aún más la carga estática se pueden colocar trapos especiales sobre la superficie del auto, también con ello se podrá evitar la atracción de partículas e impurezas.

También es importante revisar el sistema de refrigeración de la batería del auto, ya que si está en continuo funcionamiento ésta puede sobrecalentarse y afectar la temperatura de la superficie del auto.

La temperatura de secado: el aspecto más importante a tomar en cuenta

Como ya hemos mencionado, al manejar componentes eléctricos, se debe cuidar mucho el comportamiento de la batería, la humedad y de la temperatura para que éstos funcionen de manera correcta, pero también para garantizar que la pintura automotriz pueda cumplir su función.

En ese sentido, los fabricantes de vehículos deben especificar de forma precisa los límites de temperatura que se deberán respetar durante el proceso de pintado y secado del auto.

Por ejemplo, si queremos secar un auto en una cabina de pintura y no se toman en cuenta los factores de temperatura recomendados, podemos afectar seriamente el funcionamiento de la batería, reduciendo su vida útil.

De hecho, se considera que la temperatura máxima promedio que soportan las baterías oscila entre los 60 y 65ºC.

Cuidado al aplicar pinturas de fondo y acabado

La temperatura debe estar muy controlada para no afectar a los componentes eléctricos del auto y aún así, mantener una adecuada para que la pintura automotriz cumpla su propósito estético.

Lograrlo es complicado, pero la clave está en manejar bien la pintura de fondo y acabado y respetar los procesos que implican aplicarla.

Aquí es esencial el uso de masillas de poliéster y aparejos que permitan manejar el secado de la superficie a bajas temperaturas para no alterar los componentes eléctricos.

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