¿Cómo elegir la masilla correcta en repintado automotriz?

Lo primero que debes tomar en cuenta acerca de la masilla (de cualquier tipo) es que sirven para rellenar, igualar o nivelar una superficie que después será pintada.

Cuando se elige la adecuada, se abre la posibilidad de optimizar el proceso de lijado, uno de los pasos más tardados en repintado automotriz. Además, si se hace bien, se aumentará en demasía la calidad del aparejado y las pinturas de acabado.

Elegir la masilla correcta es fundamental

Es complicado, tomando en cuenta los diferentes tipos de masilla que hay, así como sus fabricantes, determinar cuál es la mejor, pero sí que puedes conocer la correcta.

Independientemente de que sea de poliéster, de fibra de vidrio, de aluminio o para plásticos, todas debes procurar que todas proporcionen las siguientes características:

1.- Facilidad a la hora de aplicar, extender y lijar el producto

Cuando se apliqué debe ser sencillo obtener una superficie lisa y de forma regular, pues aquello será determinante para que el lijado sea rápido, y que no sea necesario dar varias pasadas ni una presión excesiva.

2.- Que sea flexible y elástica

Y que además no presente porosidad, ya que eso puede dificultar el proceso de lijado y hacer que la calidad de la reparación final no sea la deseada.

Cuando es flexible y elástica también se absorben los golpes y vibraciones a la hora de lijar, para que la superficie no se agriete o se desprenda.

3.- Un gran poder de relleno

Una buena masilla no se desprende después del secado de la misma o del endurecimiento.Si no lo hace, la regularidad y el nivelado de la superficie será el correcto. Otra vez, si esto se cumple, el proceso que venga después será mucho más rápido.

4.- Que tenga buena adherencia

Las mejores masillas ofrecen una buena adherencia sobre el soporte en donde se va a trabajar, si no se utiliza la correcta para la superficie puede que se desprenda fácilmente o el lijado no sea el correcto y después aparezcan defectos en el resultado final del repintado.

Evita errores y desperfectos

Elegir la masilla correcta y aplicarla como se debe (siguiendo las especificaciones de la ficha técnica y el catalizador adecuado) puede ayudarte a prevenir defectos en el proceso de repintado, pues es la base de un buen trabajo y de calidad.

Sin la elección correcta pueden aparecer defectos y después tener que repetir todo desde cero.

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